La crisis de la pandemia ha puesto en retroceso las ya frágiles condiciones de seguridad alimentaria en amplios sectores de la población, generando nuevas situaciones de hambre, así como de deterioro de la dieta alimentaria. La situación exige tomar medidas inmediatas que aseguren la alimentación de la población en mayor vulnerabilidad, particularmente los menores de 3 años y que sirvan de protección y sostenibilidad a la seguridad alimentaria y nutricional en el país. Considerando los diversos esfuerzos que se vienen desplegando desde el Estado y la sociedad organizada, planteamos como prioritarias tres medidas urgentes:
1. Conformación de una Comisión de alto nivel para enfrentar la emergencia alimentaria.
Proponemos una Comisión de alto nivel o instancia similar, que dependa de la Presidencia del Consejo de Ministros, con representación multisectorial e intergubernamental, así como la representación plural de la sociedad civil y expertos
2. Apoyo y asistencia inmediata y universal a la agricultura familiar y la pesca artesanal.
Estos dos sectores han sido duramente golpeados en el contexto de la pandemia, generando mayor pobreza y poniendo en riesgo la producción de alimentos para el mercado interno ya que son los principales aportantes. Ambos contribuyen a una dieta bio-diversa y saludable y proveen empleo de manera intensiva (el 83% y el 80% de sus respectivos sectores). Por tanto, la inversión en estos sectores tiene una contribución sinérgica en cuanto provisión sostenible de alimentos, dieta saludable y reactivación económica. Proponemos:
2.1. Garantizar la oportuna implementación del FAE Agro (sólo ha colocado el 1% de S/.2 mil millones asignados) para la agricultura familiar consolidada e intermedia. Esta aporta entre el 40% y 50% de la producción de alimentos.
2.2. Diseñar un instrumento de transferencia monetaria de apoyo a la producción de la agricultura familiar de subsistencia, a la cual, por sus características, no le llega el FAE Agro, siendo esta mayoritaria (representa el 85%).
2.3. Extender sostenidamente las ferias locales e itinerantes para su acceso al mercado.
2.4. Implementar una transferencia monetaria de apoyo a la producción de la pesca artesanal.
2.5. Implementación de los Terminales Pesqueros para atender la cadena de frío, la manipulación y empaque de la pesca y medidas de bioseguridad.
3. Ampliación y fortalecimiento de la asistencia alimentaria a las poblaciones en riesgo, con dietas diversificadas y de calidad, garantizando el derecho a la alimentación.
3.1. Transferir recursos, alimentos y asistencia técnica a las Ollas Comunes, Comedores Populares y Comités del Vaso de Leche, contribuyendo a la movilización social en marcha.
3.2. Otorgar canastas de alimentos, fortaleciendo los objetivos nutricionales en los programas sociales (Qali Warma, Cuna Más), movilizando a los gobiernos regionales y locales.
3.3. Promover en la asistencia alimentaria, el carácter saludable de las dietas.
- Fortalecer prácticas adecuadas de alimentación a la población infantil: en lactancia materna, alimentación complementaria y consumo de alimentos ricos en hierro y micronutrientes. Incorporar en las canastas un alimento infantil fortificado.
- Introducir alimentos frescos poco perecibles o de poco procesamiento en las compras de los programas sociales.
- Evaluar la implementación de un Banco de Alimentos, de gestión pública con apoyo de la iniciativa privada, que dé sostenibilidad y calidad nutricional a la asistencia. Ensayar la entrega de bonos alimentarios.
- Desarrollar experiencias locales piloto, que articulen la asistencia alimentaria, los programas sociales y la compra de alimentos de producción local.
Es necesario incluir la EMERGENCIA ALIMENTARIA como prioridad en la agenda pública y DESPLEGAR EL NIVEL DE ESFUERZOS NECESARIOS para enfrentar la emergencia con oportunidad y efectividad.